martes, 15 de enero de 2008

La tercera no es la vencida


Después de leer las primeras dos partes de esta cosa que para estar en el mismo canal llamamos "El camino" me doy cuenta de lo pobre que es mi lenguaje y la manera de expresarme. No por la complejidad de las palabras si no por la redacción en general. Vamos a ver que se puede hacer al respecto, aún así les pido que disculpen los errores de este humilde, más que escritor, cristiano. También aprovecho para pedir disculpas por tardarme tanto en escribir, casi creo que pasa más en tiempo real que lo que pasa en la historia. Karlita me regañará por olvidar detalles pero que le hacemos, mejor tarde que nunca ¿no? (¡Saludos mujer!)

En la entrada anterior me faltó mencionar el Domingo que fuimos varios del grupo de misiones (pocos en realidad) a una misa que ofició el obispo (ahora cardenal) de Monterrey pidiendo por todos los misioneros de la diócesis. Esto tiene importancia en el sentido que me marcó profundamente el hecho de ver por primera vez a más de mil jóvenes católicos reunidos y ser cautivado por la alegría que se respiraba en forma de cantos y bailes. En fin, terminé la vez pasada contando como justo antes de la misión nos empanicamos (¿está bien dicho?) y tuvimos que recurrir a ayuda externa a nuestra frate y a nuestro coordi. Aún así llegó el sábado y no estábamos mucho mejor. Lo peor de todo es que cometí el imperdonable error de no haberme confesado con anticipación. Segundos antes de que se dispusiera a iniciar la celebración el padre Vicente, osé pedirle que me administrara el sacramento (al fin y al cabo un sacerdote no puede negar la confesión) y recibí una muy buena regañada. No sé ni cómo pero acabe sentado con mi frate y una sonrisa con una camiseta del Diec puesta que me quedaba grande (¡Gracias Chayo!). Al final de la celebración se nos entregó una cruz a cada quien y eran nuestros papás quienes nos la colgaban. La mía no entró (¡El hilo estaba corto no tengo la cabeza grande!) y tuve que deshacer el nudo, hecho que tuvo inimaginables repercusiones en un futuro.

Salimos de la parroquia todos felices y contentos y ¡oh, sorpresa! no había camiones. Después de maldecir un buen rato a la "ley de murphy" llegaron por fin un camión y una redila si mi memoria no me falla. Adentró del camión existía un ambiente ameno, de grandes expectativas y ansiedad por lo que había de venir. Mi primera impresión de los pueblo de Linares fue cuando varias amigas se bajaron en el primer pueblo (el troncón si no me equivoco) y saludaron a viejas conocidas de otra misión en otro contexto y otra vida de la que yo no era parte aún. Lo más impresionante fue ver sus caras cuando se volvieron a subir al camión y estaban llorando. Lágrimas alegres saltaban de emoción por sus caras y jugaban entre ellas (me pase, no dije eso favor de ignorarlo y seguir leyendo) por aquel reencuentro tan esperado y a la vez inesperado (repentino). En mi mente solo se leía: "Eso nunca me va a pasar a mí".

Importante factor fue el hecho de que ese sábado se llevaría acabo el clásico regiomontano de fútbol, lo cual nos motivó (a los hombres más que nada) para desempacar en cada pueblo las maletas y comida en una velocidad récord y como consecuencia lógica la última frate terminó con cosas que no eran de ellos y que más tarde la frate móvil (Daniel y Omar) tuvo que devolver a sus respectivos dueños. (creo recordar algo sobre la maleta de Karlita en el fresno). El orden de descarga no se me olvida (espero): El troncón bajó primero en la capilla y el pueblo los recibió, frate amarilla. Siguieron los del pueblo de San Rafael, frate roja. Cada vez agarrábamos más velocidad y era más rápida la descarga, en cada pueblo había despedidas emotivas. Antes de que me diera cuenta ya estaba con mi maleta en una mano, la otra tocando la cruz de mi cuello y el morral colgado sobre el hombro viendo como se alejaba el camión con la frate verde rumbo a San Francisco (Pancho).

Apéndice: La importancia de narrar un camino el cual todavía estoy lejos de terminar es tal que diga lo que diga y por más mal que escriba y por mucho que me tarde en hacerlo no debilitará su contenido a pesar de que carezca de lujo de detalles. Cada quien tenemos nuestro camino y en ocasiones cruza con el de los demás e incluso llegamos a recorrer parte de nuestro trayecto acompañados por personas invaluables. Tienes que saber desde ahorita mi muy amado lector que si estás leyendo esto es por que eres parte de este camino. Y no sé tú, pero yo muero por saber en donde termina.

6 comentarios:

Karla Edith dijo...

wow.. ahora no te regañare jejeje.. la vdd es que estoy impresionada de cómo recuerdas todo esoo.. y no me quiero imaginar cómo se va a poner esta historia a partir del retiro de Formadores .. uufff!!!

te quiero hermano!!!

Anónimo dijo...

Bueno el discurso epro Mep NOT pendejo!! la frate verde no fue a san pancho fuimos al fresno! pedaso de hahaha eksi a cualkeria le peude apsar estoy jugando..., que bueno ke escribas coas de tu vida no como yo ke no peudo escribir ams ke mis ams profundos pensamientos...ekison sbs vato..

Don Papi

httm://adpn12.blog.com

. dijo...

nótese que los acontecimientos que la tercera parte narra suceden, desde mi muy personal perspectiva, en Abril del 2007 (Misiones de Semana Santa)

Anónimo dijo...

falta muchooooooo

jajaja pero se aprecia mucho el avancee... sin embargo, te tienes que apurar, porque con todo lo que está sucediendo este semestre (gracias a Dios) se volverá una tarea imposible o asintótica (vivaaaa!! seamos hipérbolas católicamente espirituales) :)

Anónimo dijo...

Ramss.. Esto es apenass la Botana carnal jajaja, pero la verdad vas muy bien, solo me gustaría retroalimentarrte un pokirri jaja, tu como narrador omnipresente, tienes la responsabilidad de narrar tanto todos los sucesos y sentimientos o pensamientos como aquellos que tú infieres o crees que pudiesen haber ocurrido dentro de las demás personalidades, (dandoles una menor importancia claro, en especifico este es TÚ camino, pero solo para que puedas apoyarte y derivar en diferentes problematicas o sucesos que ocurrieron haya) para que así la historia y cronología de tu camino cristiano, se pueda ver fundamentada en la prescencia de Dios a través del pueblo en gral, en las situaciones, en el trabajo, clima, en tus fraternos, etc...

traes todoo ramirrooo!

pero la neta a este paso al cual vas yo no le veo un final cercano, eso es lo interesante de tu camino...

Chayo

Karla Edith dijo...

salgo de colada en la foto jajajajajajajaja

pd esta chida la retro de chayo.