(Hay que leer antes: losviajesdetom.blogspot.com)
Quiero decir que la muerte de Beto fue algo que me agarró de sorpresa, a pesar de todas las pistas que se dan antes de que está enfermo. Creo que es algo que nos tiende a pasar en la realidad, creemos que la muerte está lejos. Y en todo caso de que llegara a morir alguien, nunca pensamos que sea aquella persona querida y mucho menos alguien como Beto que estaba tan cerca de Dios y era tan feliz.
Lo que me impacta es el momento en el que "parte a la casa paterna". Recuerdo que la primera vez que lo leí lo primero que se me ocurrió fue decir: "¡qué bella es la muerte cristiana!". Caí en la cuenta y al mismo tiempo recordé las palabras de San Pablo: "Por que para mí la vida es Cristo y la muerte una ganancia" (Flp. 1,21). Se dice fácil ¿no?
Sólo espero que el día que me toque a mí partir a la casa paterna pueda tener esa Fe y esa entrega que tuvo Beto. En el momento de la verdadera prueba poder lanzarme confiado al abismo. Y al mismo tiempo poder aceptar la partida de aquellos que amo y poder confiar también de que todo es parte del plan perfecto de Dios.
)2.
Hace 10 años.
1 comentario:
Excelente entrada hermano :)
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